Demetrio Aguilera Malta nació en Guayaquil el 24 de mayo de 1909 y murió el 28 de diciembre de 1981 en México; su cuerpo fue incinerado en este mismo lugar donde permanece su corazón y sus cenizas fueron llevadas en un avión a Guayaquil y arrojadas en alta mar frente a la Isla Puná.
Su principal aspiración es recrear el mundo del “Cholo rural”, sus costumbres y su forma de vivir, asociándose con el dolor y su fracaso para poder representarlos de manera más precisa.
Perteneció a la llamada Generación de los 30 o Grupo Guayaquil entre los cuales estaban Enrique Gil Gilbert, Joaquín Gallegos Lara, José de la Cuadra, Alfredo Pareja Diezcanseco y el propio Demetrio los cuales se dedicaron a escribir acerca de los problemas sociales que existían en ese entonces.
En 1930 publicó, junto a Enrique Gil Gilbert y Joaquín Gallegos Lara, una de las obras clásicas de la literatura ecuatoriana: “Los que se Van” (Cuentos del Cholo y del Montubio), y tres años más tarde, la que para muchos está considerada como su mejor obra: Don Goyo, entre otras más.
<Los que se van> es una recopilación de varios cuentos entre los cuales está:
“El Cholo que se vengó” (Fragmento)
Tei amao como nadie ¿Sabés vos? Por ti mei hecho marinero y hei viajao por otras tierras….por ti hei estao a punto e ser criminal y hasta hei abandonao a mi pobre vieja; por ti que me habis engañao y te habis burlao e mi…pero mei vengao! Todo lo que te pasó ya lo sabía yo dende antes. ¡Por eso te deje ir con ese borracho que hoi te alimenta con golpes a vos y a tus hijos¡….
Si hubiera sio otro….. ¡ah¡… lo hubiera desafiao ar machete a Andrés y lo hubiera matao…pero no!. Er no tenía la curpa. La única curpable eras vos que me habías engañao. Y tú eras la única que debía sufrir así como hei sufrió yo….
Demetrio Aguilera Malta
En este cuento podemos observar claramente como el autor enaltece el lenguaje coloquial de los montubios es decir su forma de expresarse.
Brevemente este cuento nos relata la traición que vivió un cholo por parte de su mujer, y como él se vengó sin necesidad de usar la fuerza, simplemente la vida se encargó de castigarla, poniéndole en su camino a otro hombre que la lastimó y le enseñó el dolor que de cierta manera fue el mismo que le causó a su marido dejándolo por otro.
Bibliografía
- Karl H. Heise, “El grupo Guayaquil: Arte y Técnica de sus novelas sociales”, Madrid – España.
- Jorge Enrique Adoum, “Los que se van: Estudio introductorio”, Editorial
Hispanoamericana 1930, Guayaquil – Ecuador.
Publicado por : Vivian Calderón López