Si bien es cierto mediante la palabra nosotros podemos expresar muchas emociones, y sentimientos, podemos manifestar lo que nosotros queramos en el momento que lo decidamos, pero debemos tener en cuenta que si hacemos uso de esta tenemos que tener cuidado, porque las palabras que decimos nunca se borran, y pueden causar mucho daño a las personas es por eso que se dice que somos dueños de todo aquello que emitimos.
A lo largo de los años han habido iconos importantes o ídolos que hemos seguido debido a que admiramos lo que han hecho o simplemente imitamos sus cualidades, los mismos que de una u otra manera han influido en nuestras vidas por sus experiencias y reflexiones que nos han motivado positiva y negativamente.
Como un ejemplo podemos mencionar a la madre María Teresa de Calcuta que con su actitud misionera ayudó a muchas personas y con sus palabras de humildad se metió en muchos de los corazones de la gente que decidieron seguir sus pasos, por otro lado negativamente podemos mencionar a bandas de rock que con su estilo de rebeldía han inducido a la gente joven a las drogas, al alcohol, las peleas etc.
Es por eso que antes de hablar o emitir alguna opinión de algo o de alguien debemos pensar bien y usar las palabras correctas para ser asertivos con el mensaje que queremos llegar a dar.
Artículo publicado por Vivian Calderón López
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